Ahora bien estoy seguro que muchos aplauden esa gran iniciativa y respaldo que le da al talento artístico nacional e internacional teniendo en cuenta que a usted, estimado Presidente, no le atraiga algunos eventos pero aun así respeta el gusto de los venezolanos.
No es una insistencia personal ni un capricho de pocos, quienes platean la necesidad de que se habilite el coso taurino de la Plaza de Toros Nuevo Circo de Caracas para llevar a cabo espectáculos taurinos. Yo me sumo a ese anhelo de la mayoría de caraqueños y muchos venezolanos que desean que por lo menos cada sábado o domingo mientras el coso taurino no este en servicio para otras actividades culturales de cualquier tipo, se organicen en el recinto taurino de San Agustín las corridas de toros, por así definirlo, considerando que existen otros propósitos válidos necesarios para la comunidad desde el punto de vista ideológico, cultural, artístico y social.
Lamentablemente hoy día persiste, una diminuta corriente de jóvenes antitaurinos en algunos sitios donde se realizan corridas de toros e incluyendo nuestro territorio nacional que argumentan sobre el sacrificio que se hace con el toro de lidia en un ruedo por un matador de toros o novillero, manejando criterios mal infundados, sin bases sobre la cultura taurómaca, laborales, productivas, históricas y profesionales. A los antitaurinos no se les puede convencer porque no lo son por cuestiones estéticas, ni animalistas siquiera.
Por tanto, es la ignorancia de esa minoría caprichosa la que se ha encargado en cerrarle las puertas a una de las Plaza de Toros mas importante de Latinoamérica y la mayoría de Caraqueños y venezolanos que no han dejado de soñar en ocupar los espacios del Nuevo Circo de Caracas para ver en ella y estar presente en las futuras corridas de toros que se puedan dar en ese coso taurómaco. Desde que el Nuevo Circo de Caracas abrió sus puertas para darle acceso y prioridad a eventos artísticos y culturales para el disfrute de las comunidades de la capital de la República, la mayoría de aficionados taurinos venezolanos no han reclamado, censurado, excluido ni boicoteado los diferente espectáculos (circos, conciertos, encuentros culturales) en dicha área histórica de los caraqueños y venezolanos. Porque jamás la familia taurina ha rehuido al debate, donde la parte que reclama igualdad de oportunidades se plantee la inclusión y los derechos ciudadanos para así seguir evidenciando las infinitas bondades de nuestra Constitucional Nacional.
Finalmente, Presidente Nicolás Maduro, hay propuestas taurinas de un pueblo taurino para el disfrute del Nuevo Circo de Caracas. Eso si, no excluimos a esa minoría de compatriotas que ha permanecido hasta la fecha en nuestra Plaza de Toros donde se han llevado a cabo múltiples actividades artísticas y que han gozado del espacio pensando en seguir excluyendo a la mayoría de los aficionados taurinos venezolanos. La fiesta taurina ¡SI! lleno de pueblo el Nuevo Circo de Caracas, pueblo revolucionario, pueblo de inclusión e igualdad.
Gracias Presidente Nicolás Maduro Moros.
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