De distintas maneras de arrimarse, acabó en buen nivel la Feria de San José 2023...!!!

“EN CADA LANCE DEL TORERO VA LA VIDA,

PERO TAMBIEN VA LA GLORIA”

LAS CORRIDAS DE TOROS

ES NUESTRA FIESTA Y LA TUYA

ES PARTE DE NUESTRO COMPROMISO

DEFENDÁMOLAS

Rodolfo “Positivo”

0424-283-13-96.

     Realmente la región aragüeña esta en S.O.S en ver corridas de toros, para ser más sincero, estamos muy enfermos de psiquiatría en el buen sentido de la palabra. Hoy en día, un gran aficionado a los toros requiere exageradas dosis de paciencia y romanticismo, cualidades que son tan necesarias para mantener el gusanillo de la afición, y con qué poco se conforman esos locos llamados aficionados.

     Los corazones serán las únicas campanas de alarma de nuestras emociones y estarán fielmente presentes a lo largo de nuestra existencia como aficionados, rodeados siempre de un público ocasional que no distingue lo bueno de lo malo y que no tiene el más mínimo sentido crítico, los aficionados vuelven a la plaza con el anhelo de un toro bravo y un torero valiente, artista y capaz.

     Menuda tarde en el Festival Taurino del pasado sábado 25 en Maracay. ¡Otto Rodríguez, César Vanegas, José Cariel “El Amarillo” y Andrés Vanegas! Me comentaba el gran aficionado taurino Pedro Cortéz, apoderado de toreros y organizador de festejos taurinos, que desde que se cerró el cartel y se anunció en las redes, había que ir a este gran festival taurómaco en honor al Santo Patrono de Maracay, San José, que este homenaje estaba claro desde hace casi un mes como una premonición a la salida de ver festejos taurinos en esta región aragüeña. Verdaderamente no podíamos esperar una tarde menos especial, tan llena de ilusión como la que estos cuatros jóvenes diestros. Pedro Cortéz, con gran emoción me comentaba que este festejo, como cierre de feria de San José, debe recuperarse y que vuelva a ser cita obligada en nuestra agenda taurina, que sirva como abrebocas a las esperadas Ferias de Sevilla y Madrid.  

     En mi apreciación tiene toda la razón en su comentario; Pedro Cortéz insistía que es un festejo perfecto para todos los participantes por ser más cómodos y aliviados para todos; perfecto para todos los concurrentes taurinos clave, que acudieron en masa a dicho festival; perfecto para la heroína ganadera Carmen Rosa Campolargo, por los ejemplares que seleccionó y envió, porque tienen lo que se dice un filón lidiando sus animales con nuestros toreros nacionales e internacionales, sin que haya discrepancia alguna. Culminó diciéndome que este festival era tan perfecto que intervinieron los aficionados más exigentes, puesto a que el panorama cambió como de la noche al día. Claro está que, Pedro Cortéz, muy conocedor de los que visitan las gradas taurinas saben bien que el matador de toros José Cariel “El Amarillo” hace este tipo de festejos para unos aficionados pudientes y gente clave que pagan lo que el festejo vale, con tal de formar parte de un selecto y exclusivo grupo de grandes conocedores taurinos.

     Volvió a Maracay la triunfadora ganadería Campolargo, en esta ocasión al mando de ganadera Carmen Rosa Campolargo, máxima heroína de todas las ferias a nivel nacional, fue, esta vez, con un encierro más bueno que nunca, les sirvió a los toreros que quisieron y supieron aprovecharlo, que transmitió la emoción que se espera en este tipo de hierros. Muchos dirán que casi todas las becerras “se dejaron”, no se llegó a observar esas horrendas expresiones de embestidas de algunas reses que hoy en día se pilla en algunos toros y becerras del campo bravo. Aunque el problema está en que los toros nunca deberían dejarse; más al contrario, deberían pelear con fiereza y vender cara su vida como sucedió con las becerras de Campolargo.

Sabor y Torería de Otto Rodríguez

     Otto Rodríguez ha demostrado que sigue teniendo más conocimiento y recursos para estar en otro sitio dentro de este mundo del toro, luego de estar por un tiempo apartado de este medio taurófilo. En la becerra de turno, ha conseguido "meterle" en la muleta en varios pasajes de la faena y además con una técnica envidiable. Actuación en esta vaquilla dignísima y profesional. No ha sido menos ante la fogosa embestida del animal, queriéndose comer los vuelos del percal del diestro Otto Rodríguez, en el recibimiento con el capote, logró realizar unos lances de calidad y yo creo que estaba tan extasiado y emborrachado de torería que no se ha dado cuenta que él no estaba solo en el ruedo.

     Luego de ver la becerra en el caballo, volvió con la capa dibujando una serie de verónicas descomunales, impresionantes por su arte, su ritmo, su temple y por su manera de acompasar el movimiento de las manos con el giro de la cintura, llevando a la vaquilla embebida en los vuelos del capote. El remate de esta serie, con dos medias de frente y con los pies juntos ha sido de órdago. Siendo consciente, si es que en ese momento se puede tener consciencia, de que las verónicas no las iba a mejorar, nuevamente hace alarde con el capote otro homenaje de varios quites. ¡Qué forma de crear arte! Otto Rodríguez las borda, las engalana, las prende y ¡ahí queda eso! Para quien lo quiera mejorar.  Vio de forma clarividente las condiciones que la becerra tenía, podían propiciarle un éxito si las cosas se hacían bien y contando que no se rajara. La del hierro de Yaracuy no se rajó en ningún momento y Otto comenzó a hacer las cosas con sentido, con gusto, con torería, entendiendo perfectamente las encastadísimas embestidas de la res. Ligó series con la derecha con sentido, ritmo, temple. Siempre con los pies aplomados en el suelo. 

     Pues bien, en esta becerra, ha estado inmenso. Los trincherazos y los desplantes con la mano izquierda han sido realmente tremendos. Las series con ambas manos han tenido gusto y sabor a torería, basados en los pilares básicos de la tauromaquia como son la técnica y la valentía. Ha utilizado una técnica que pocas veces se ve. Antes de citar, enseña la muleta por el pitón contrario e inmediatamente cita por el pitón por el que se va a producir el muletazo. Lo ha realizado varias veces, con ambas manos, con continuidad y ligando las series. Ha conseguido levantar al público de sus asientos. Remató la faena como todos los demás toreros simulando la muerte y se le concedieron las dos orejas simbólicas.

César Vanegas se inventa una gran faena

     César Vanegas estaba con muchas ansias de triunfo y así lo demostró en la segunda vaca yaracuyana. Vanegas logró inventarse una faena para tocar el triunfo, se mostró muy centrado en su vaca, una tía de retienta, con fijeza transmitía, con mucha raza, a la que el torero de Seboruco consiguió meterle la franela en el pitón izquierdo para sacarle algún buen extraordinario muletazo por el único pitón donde más se entregó. Esta faena no debe pasar desapercibida por ser una de las más meritorias del festejo. Como se la haga a un toro en una plaza importante, les echo un cuento. A veces se quedaba muy corta en los primeros muletazos. César siguió probando por el lado izquierdo perdiéndole pasos. El torero, lejos de afligirse siguió intentándolo con la firmeza de un novillero y esa paciencia terminó por dar frutos. La vaca acabó tragándose muchísimas series de naturales espléndidas. Faena de mucho fondo, faena correcta y sin apreturas a la manejable de retienta de Carmen Rosa, que salía del muletazo con la cara alta, pero con mucha nobleza, había que llevarla muy templada y a la altura correcta, pues si el torero se daba coba, le apretaba y protestaba, defendiéndose y derrotando al engaño.

     Sin embargo, la faena de esta señora vaca ha sido posiblemente una de las más importantes de estos tiempos de César Vanegas. Cumbre por haber sido capaz de someter y torear magníficamente por naturales a una vaca que había sembrado el desconcierto en los primeros tercios. Cesar Vanegas hizo un enorme esfuerzo con una faena de mucho mérito acabó pudiéndole a la de Campolargo hasta que ésta comenzó a recordar lo que había aprendido durante la lidia demostrando claramente su verdadera condición llegando al punto de rajarse. 

Andrés Vanegas: A por todas con las pruebas decisivas

     Respecto a Andrés Vanegas, los novilleros de hoy en día tienen un oficio por estrenar. Por cortesía cuesta mucho hacer una crítica a estos jóvenes, a quienes mueve la voluntad de ser toreros. Sin embargo, la ilusión no es todo. Más bien es nada. En otros tiempos los aprendices en esta aguerrida profesión se curtían en mil batallas, y cuando ya estaban placeados adquirían la alternativa para presentarse por méritos propios en las plazas de postín, al examen de cátedra. Ahora, la situación es bien diferente. Se cultivan en escuelas de tauromaquia, piden unos cuantos permisos para torear algunos becerros, arriesgan mucho de sí mismos haciendo lo que sea para despuntar, acuden a alguna tienta, algunas veces otorgan trofeos a estos novilleros de promociones con un beneficio para los apoderados engañando a estos jóvenes algo que es muy grave. 

     Se encuentran con una buena preparación física y con mucho toreo de salón al aire. Y de pronto, como ya lo resalte de urgencia se topan con algún cazatalentos de apoderado que les presentan como novilleros de revolución. Sin oficio por vivir, sin recursos por experimentar, sin bases para no dudar, sin criterio para resolver, además de engañados. Pero como hay prisa, pues allá que los meten con calzador en algún cartel considerado. Será por si suena la flauta. Pero la flauta no suena así porque sí. Puede haber uno entre millones que tenga un talento natural, pero incluso éste, no destacaría sin conocer las entrañas del oficio. A estos jóvenes chavales se les debe pedir más. Hay que exigirles más, y no confundir las críticas de mala fe, con las ganas verdaderas que tenemos que salgan nuevas promesas, con personalidad, con competencia, que pongan esto boca abajo, o que revolucionen el toreo, si se ven capaces. 

     El novillero Andrés Vanegas no pudo con su vaquilla, unas de las más nobles y con raza del encierro. Que ya tiene mérito: si es cierto. Trató de enfrentarse a la de su lote con una decisión inaudita. Porfió y porfió hasta que le sacó tandas de naturales con verdadero mérito pero muy atropellado, Vanegas nuevamente lo intenta por todos los medios y de todas las formas y solo consigue algún que otro muletazo de cierta calidad con la mano zurda. No está muy placeado este torero, es verdad. Pero, es que tampoco tiene técnica, dominio, don natural, inspiración, o algo que destacar. Debe buscar adquirir recursos lo más pronto posible si quiere seguir luchando por ser una Figura Nacional.   

     Indiscutiblemente queda claro el entusiasmo desbordado tras otra tarde de triunfo en Maracay, esta, sin embargo, no fue una tarde más. Ésta fue muy seria y de mucho esfuerzo de los tres toreros. Enhorabuena a ellos.

     

     Fotos: Federico Montes